miércoles, 26 de octubre de 2011

Primer fusil automático del mundo [Hecho en Mexico]

Fusil Mondragón


El Fusil Porfirio Díaz Sistema Mondragón Modelo 1908 era un fusil semiautomático mexicano. El Mondragón fue el primer fusil semiautomático y automático del mundo[1] y fue diseñado por el general Manuel Mondragón. Este comenzó a trabajar en 1882 y patentó el arma en 1887. El fusil era accionado por los gases del disparo, mediante un cilindro y su respectivo pistón, algo bastante habitual hoy en día pero muy inusual para su época. Tenía un cerrojo rotativo, el cual se movía mediante tetones que se encajaban en estrías helicoidales de las paredes del cajón de mecanismos; también podía emplearse como un fusil de cerrojo con acción rectilínea. Disparaba cartuchos 7 x 57 Mauser, alimentados mediante un cargador con capacidad para 8 cartuchos. Una variante automática de este fusil tenía un cargador con capacidad de 20 cartuchos y un bípode, como el BAR; el Ejército mexicano empleó un tambor con capacidad de 100 cartuchos en la versión ametralladora ligera de este fusil, producida en 1910.








Características

El Mondragón es el primer fusil semiautomático y automático de la historia belica accionado por los gases del disparo, pero podía funcionar como un fusil de cerrojo si se cerraba la válvula montada en el tubo de gases. Empleaba dos modelos de bayoneta, una tipo cuchillo y otra tipo espátula[2] , que tenía un filo para cortar alambre y otro para cortar madera.

Este fusil era conocido por su gran precisión[cita requerida] y poder de parada, pero sus versiones automáticas eran difíciles de controlar cuando disparaban en modo automático. El Mondragón era tan preciso, que la Wehrmacht le agregó una mira telescópica y lo empleó como fusil semiautomático de francotirador durante la Segunda Guerra Mundial. El Mondragón también tuvo una versión ametralladora ligera, que al emplear un tambor de 100 cartuchos tenía una cadencia similar a la MG42, pero era más portátil y tenía mucho menos retroceso. Por este motivo, el Ejército mexicano empleó una versión mejorada de la versión ametralladora ligera del Mondragón hasta 1943, cuando fue reemplazada por la ametralladora ligera Mendoza RM2.

Producción inicial

Debido a la Revolución Mexicana, pocas fábricas de México eran capaces de producir en serie el fusil y aquellas que podían, no estaban en condiciones de parar sus líneas de producción para ajustar sus maquinarias e iniciar la producción de nuevos fusiles. Mondragón trató entonces de vender la patente a una empresa de los Estados Unidos, sin éxito debido a que pensaron que los fusiles semiautomáticos no eran prácticos y no podían producirse en las cantidades que México precisaba. Es entonces que busca vendérsela a la Schweizerische Industrie Gesellschaft (SIG), de Neuhausen am Rheinfall, que estuvo de acuerdo en fabricar el fusil. En 1901, los primeros fusiles fueron enviados a México y suministrados al Ejército Mexicano como el Fusil Porfirio Díaz Sistema Mondragón Modelo 1900 con un cargador de 8 cartuchos. En 1908, durante la Revolución Mexicana, se le suministró al Ejército una versión de fabricación totalmente mexicana denominada Fusil Porfirio Díaz Sistema Mondragón Modelo 1908, pero esta vez con un cargador de 20 cartuchos. Sin embargo, para 1910 ya se habían construído fábricas en las ciudades de Veracruz, Ciudad Juárez, Guanajuato, Guadalajara y México, D. F., donde fueron producidos hasta 1943, pese a su poca produccion, se dice que este fusil fue empleado en batalla por los revolucionarios Emiliano Zapata y Francisco Villa.








Empleo en la Primera Guerra Mundial

Con el estallido de la Primera Guerra Mundial, Alemania compró a la SIG lo que quedaba del lote de fusiles que no había sido enviado a México y los suministró a su infantería, que encontró problemas debido a que el mecanismo del fusil era muy susceptible a bloquearse con el lodo y la tierra que había en las trincheras (un problema común, incluso para fusiles de cerrojo menos complicados como el Ross). En cambio, al notar su potencial como armas semiautomáticas portátiles y potentes, fueron retirados del frente por el Alto Mando alemán y resuministrados a las tripulaciones de aviones con cargadores helicoidales de 30 cartuchos, con la denominación de Fliegerselbstlader Karabiner 1915 (Carabina autocargable de piloto Modelo 1915, en alemán), hasta que las ametralladoras estuvieron disponibles en cantidades considerables.

Empleo en la Segunda Guerra Mundial y después

Durante la Segunda Guerra Mundial, todavía quedaban muchos fusiles mexicanos en los arsenales alemanes sobrantes de la Primera Guerra Mundial. Estos fueron suministrados al Waffen SS como armas auxiliares, a veces como reemplazo o arma complementaria al Kar 98k durante las primeras etapas de la guerra. Durante el asedio de Stalingrado, algunos soldados del Wehrmacht los emplearon en lugar del Kar 98k debido que eran más suceptibles al clima frío. Y durante las últimas etapas de la guerra, fueron suministrados a varias unidades del Volkssturm. También llegaron a Francia, al ser donados por el Tercer Reich al Ejército de su aliado, la Francia de Vichy. Varios fusiles fueron capturados y empleados por la Resistencia francesa. Pocas versiones alemanas con cargador helicoidal han sobrevivido. Sin embargo, el Ejército mexicano todavía emplea este fusil en desfiles como fusil ceremonial.[3







FUENTE